“Es monstruoso que el dedo sobre el gatillo sea la respuesta al dedo sobre el obturador”. Henri Cartier-Bresson
Este 25 de enero se cumplieorn 13 años del horrendo crimen de nuestro compañero José Luis Cabezas. Desde la FATPREN lo recordamos, como testimonio vivo de las consecuencias del ejercicio del poder y la mafia, que no trepidan a la hora de silenciar imágenes y voces que puedan amenazar el cerco de silencio que protege su permanente impunidad.
Este poder y esta mafia siguen demasiado vigentes en la región, como lo demuestran los treinta periodistas asesinados en el 2009 en América Latina en el ejercicio de la profesión, mientras en nuestro país no decrecen las amenazas, las agresiones físicas, los atentados y otras formas encaminadas a mutilar la libre expresión.
En memoria de José Luis y el compromiso con su familia, es permanente nuestro reclamo de Justicia. Seguimos confiando en ella. Y que la Suprema Corte de Justicia de la Nación dé cumplimiento efectivo al dictamen que entre los meses de noviembre y diciembre últimos confirmó la condena a prisión perpetua de “los Horneros” Horacio Braga, José Luis Auge y Sergio Gustavo González, que hoy no están ni en prisión.
Ellos, junto a los ex policías Alberto “la liebre” Gómez y Gustavo Prellezo, que sí están adentro y con reclusión perpetua, no deben tener ni libertad ni oportunidades, porque Cabezas no las tuvo cuando fue arrodillado y ejecutado en una cava de Pinamar.
Y además, porque la sociedad argentina debe tener la seguridad que se combate con firmeza a los que deciden ser brazos ejecutores o funcionarios corruptos, que asesinan o liberan zonas por dinero y mandato de los poderosos, que no renuncian a vivir sin en el escudo de la impunidad, aún a costa de cegar vidas humanas por el camino.
Con esta convicción, recordamos a Cabezas. Él sigue presente en la Memoria, junto a los que luchan por un periodismo y una sociedad mejor.
